Comunicándonos

#BuenaSemana N°78

Muchas veces en la vida hemos hecho el intento de armar rompecabezas. Este es uno tridimensional: el cubo de Rubik. Podemos intentar muchas maneras, una es armar la primera parte, ubicar las aristas, y armar el bloque de abajo. El propósito real de Rubik era resolver el problema estructural que lograra mover las partes independientemente sin que el mecanismo entero se desmoronara.

Si pensamos en la vida de cada ser humano también se mueven continuamente muchas aspectos, la vida se tiñe de distintos colores, de acuerdo a lo que vayamos viviendo, decidiendo o construyendo. Pero para que no nos desarmemos como el cubo tenemos que tener un centro con ejes seguros. Nos permiten movernos con libertad
sin que nos vayamos rompiendo ante cada acontecimiento.

Te invito en estos días a mirar tu centro, lo más profundo tuyo, y ver si el mismo o algún eje oxidado que no te permiten moverte libremente o que necesita aceitarse.

Que tengan buena semana.

Hna. María Elena Fernández
Inspectora